Capítulo 28 y último

--¿¿es eso verdad?? --pregunta Carlos a Jose.
Jose lo mira con miedo.
Carlos lo agarra del brazo y lo zarandea:
--¿¿¿¡es verdad o no??
Jose llora de rabia. Juliana sigue hablando:
--¡¡y di también que para que se casara con tu hermana antes me quisiste matar a mi¡¡
Carlos suelta a Jose y se enfrenta a Juliana:
--¡¡eso sí es mentira¡¡
--¡¡por eso se casó conmigo porque tengo una grabación en la que confiesa ser al autor intelectual de una agresión que sufrí hace meses. Unos hombres me destrozaron la cara y me violaron, de ahí nació mi hijo..Alberto me salvó la vida¡¡
Carlos mira decepcionado a Jose. No lo puede creer.
-yo sólo quería tenerte a mi lado--se justifica Jose.
Alberto se le echa al cuello y dice:
--¿¿¿¡quienes fueron esos hombres??¿¿quienes?
Jose mira a Carmelo y dice:
--los contraté a través de él...
--¡¡maldita maricona lengua larga te voy a matar¡¡ --Carmelo.
Alberto golpea a Carmelo.

Todos están impactados por lo que ha pasado. Manuela y Mariana abrazadas miran con odio a Leonor. Carlos llora en un rincón abatido mientras la policia se lleva detenidos a Carmelo y Jose. Jose mira a Carlos y le dice:
--todo lo hice porque te amo y queria que fueras el marido de mi hermana.
A Jose le duele la mirada de odio de su amado que no le dice nada. Juliana ya se siente más tranquila y prepara sus maletas para irse junto a Alberto. Las hijas de Vento miran llorosas mientras se llevan el cuerpo de su padre. Carlos se quiere acercar a Manuela pero está no se lo permite:
--¡¡largo de mi casa¡¡
--¿¿cómo?? --Carlos.
--¡¡no te quiero volver a ver¡¡
Manuela va a su dormitorio, Carlos detrás:
--¡¡yo te amo¡¡
Manuela lo bofetea:
---¡¡todo fue un engaño¡¡
Carlos la abraza con desesperación:
--¡¡pero nos enamoramos.¡
Manuela llora:
--¡¡mi hermano se volvió loco por tu culpa¡¿¿de veras crees que yo puedo amarte sabiendo que mi hermano te ama?¡¡
--¡¡tú lo has oido, él quiere que estemos juntos¡¡ --dice Carlos desesperado.
--Por favor vete.
--¿y mi hija?
--la podrás ver cuando quieras, me avisas para que yo no esté. Ahora vete.--dice Manuela con amargura.
Manuela se encierra en el baño para no ver a su marido. Llora deshecha. Carlos hace su maleta derrotado. Da un beso a su hija. Mira con lágrimas de sangre la puerta donde se encerró su amada y se va.

Días después... Carlos está viviendo en casa de Sergio.
--¡¡estoy desesperado. Manuela no me hace caso¡¡no logro verla¡¡¡yo la amo¡¡
--¡¡tienes que entender que lo que pasó es duro, dale tiempo¡¡ Mariana está apoyando a Manuela y ahora que Mariana es mi novia yo trataré de ayudarte. Es cuestión de tiempo¡¡ entre mi novia y yo convenceremos a tu esposa.
Carlos está desesperado.

Mientras en la cárcel, sólo y despreciado por su familia, por su amado, Jose es la burla de los de la cárcel ya que Carmelo los ha puesto en contra de todos. Los hombres implicados en la agresión a Hilda ya están en la cárcel y entre todos rodean a Jose y le clavan un puñal. Lo matan. Luego deciden vengarse de Carmelo:
--así que te gusta acostarse con hombres por dinero ¿no?.¡pues nosotros te lo haremos gratis¡¡
Carmelo se asusta pero no puede impedir que esos cuatro hombres lo violen.

En el entierro de Jose, Sergio está al lado de Mariana, Juliana va con Alberto. Todos se sorprenden de su presencia. Ella mira a Carlos y Manuela que están separados y les dice:
--gracias a él conocí el amor de mi vida... --dice mirando a Alberto-- que descanse en paz.
Carlos trata de acercarse a Manuela después del sepelio pero ella solo le dice:
--te espero en la casa mañana.
Carlos sonríe enamorado:
--¿me vas a perdonar?
Muy dolida, Manuela dice:
--no, tienes que estar en la lectura del testamento de mi hermano...
--¡¡a mi no me interesa ese dinero¡¡
--pero debes estar, es lo que quería mi hermano.
--estaré porque tú me lo pides.
Carlos trata de acariciarla con dulzura pero ella lo desprecia con dureza. Se va. Carlos se quedan triste. Mariana y Sergio lo abrazan y le dan ánimos. Le aseguran que Manuela comprenderá que su felicidad es a su lado y que volverán a estar juntos. Carlos mira a Manuela que se gira de lejos. Los dos se miran llorosos pero ella se acerca a él. Carlos mira con tristeza la tumba de Jose. Recuerda aquel adolescente que lo espiaba en los vestuarios de la piscina. Se arrodilla ante la tumba, acaricia la tierra:
--siento de veras que las cosas haya acabado así, ojalá me hubieras visto solo como un hermano.
Con una gran amargura en su alma, Carlos se va del lugar.

Leonor no ha ido al entierro de su hijo. Está sola en el despacho de su casa. Está enloquecida por la ambición:
--¡¡todo es mio¡¡¡ahora todo es mio¡¡no sé para qué una lectura del testamento¡¡¡por suerte ya Jose se iba a divorciar de esa prostituta y le iba a sacar el apellido a su hijo... todo es mio... mio¡¡
Las cosas no son como Leonor piensa. Ante su presencia y las de sus hijas y Carlos se lee el testamento en el que Carlos es nombrado heredero universal de Jose. Manuela y Mariana toman bien la noticia. Carlos no da crédito a lo que oye. Leonor se pone como loca, sufre una fuerte crisis y acaba huyendo de la casa. Todos están perplejos por la reacción de la mujer pero no hacen nada, Carlos no tarda en decir:
--yo no quiero esa herencia.
Manuela se le acerca y lo acaricia:
--hazlo por mi. Mi hermano queria que tú tuvieras ese dinero. Además si renuncias a la herencia todo se lo quedará mi madre y no se lo merece. No nos dejes a Mariana y a mi desamparadas.
Carlos la mira triste y dice:
--¿volverás conmigo?
Manuela desea volver a su lado pero las heridas duelen demasiado:
--dame tiempo.
--Yo no quiero ese dinero, lo acepto pero lo pongo a tu nombre y al de Mariana.
Ninguna de las dos hermanas lo aceptan. Sergio se acerca a Carlos y le susurra:
--no seas tonto. Manuela no se opondrá que vivas en esta casa y así, viviendo juntos, te perdonará.
Con esa esperanza acepta.

1 año después... Carlos pone flores en la tumba de su Jose.
--No sé si fue buena idea aceptar tu herencia. Yo amo a Manuela pero ella no puede olvidar que tú me amabas. Es tan duro vivir con ella y no tener su amor. No se le mete en la cabeza que tú lo que hiciste es porque querias que ella fuera para mi, tú sabias que yo nunca seria tuyo y eso te consolaba. Estés donde estés no puedes descansar en paz porque tu sueño no se te cumplió.
Carlos no se da cuenta que Manuela escondida tras un arbusto lo ha oido todo. Sonríe con tristeza.

Mientras en el hospital, Mariana y Juliana han coincidido dando a luz. Los padres de los bebés, los felices Sergio y Alberto están con ellas. Alberto va a ver a Juliana con su hijo mayor, Albertito al que Juliana ya no rechaza. Por su lado, sin que nadie la visite ni se acuerde de ella, Leonor está encerrada en una clínica mental.

En la noche, Carlos está tumbado en su cama. Se abre la puerta y entra Manuela. Él se levanta semidesnudo.
--Manuela¿tú aquí?
Ella lo mira enamorada y mientras se le acerca le dice:
--ya he comprendido que nuestro destino es estar juntos y espero que no sea tarde.
Se miran frente a frente, los dos están muy emocionados:
--Manuela... eso quiere decir que... --intenta decir él con ojos llorosos y un nudo en la garganta.
Ella lo interrumpe:
--que te amo y que por fin, si tu quieres, podemos ser un matrimonio normal.
Carlos la abraza con desesperación:
--¡¡eso es lo que más quiero..Manuela, mi Manuela... te amo tanto¡¡
--y yo y yo. Eres lo que más quiero junto a nuestra hija, quiero que seamos una familia.
El uno se aferra al otro decidido a no separase jamás.
Fin