Capítulo 15

Carlos y Manuela duermen desnudos el uno en brazos del otro sin imaginar nada de lo que está pasando. Jose está muy excitado por tener el cuerpo desnudo de Carlos para él. Tiene la mano muy cerca de los genitales de él pero no se atreve a profanar el cuerpo del guapo chico.
--un beso., un beso sí le puedo dar,  quiero saber a qué saben sus labios.
Con mucho miedo, Jose acerca sus labios a los del chico guapo, a penas los roza pero eso lo excita mucho. Siente que el corazón se le va a salir por la boca. Está muy excitado. Se baja los pantalones porque necesita un desahogo. Se ha masturbado miles de veces pensando en el cuerpo desnudo de ese chico y disfruta haciéndolo con él desnudo. Jamás sintió tanto placer.

Esos cuatro que han violado a Hilda la abandonan bañada en  sangre, tiene el rostro desfigurado. La dejan abandona tras unas matas. En una carretera de poco paso. Parece muerta. Mientras abandonan el lugar en el auto, el digamos jefe hace una llamada.  Jose, que se está  subiendo los pantalones, toma su celular con ansiedad como si estuviera esperando una llamada.
--¡¡ya está¡ --dice el violador y cuelga.

Al día siguiente, Leonor despierta a su marido:
--Vento, ¿qué pasó? ¿¿te dormiste?
Vento abre los ojos medio dormido:
--¿que pasa?
--eso digo yo, parece que todos se han dormido. Manuela no me trajo el desayuno..
Vento está muy cansado y no tiene ganas de levantarse, Leonor le da empujones:
--venga, ve a despertarla, tengo hambre.
--¿y porqué no vas tú?
Leonor se hace la víctima:
--me duelen las piernas, no me siento bien.
Vento se levanta y va al cuarto de su hija. Leonor sonríe maléficamente. Aunque no quería que su hija se casara si le gusta dominarla totalmente y que no sea Manuela sino ella la dueña de la vida de su hija.

Manuela y Carlos se despiertan el uno en brazos del otro. Están desconcertados. Los dos se miran con sorpresa. Manuela se sobresalta al verlo desnudo y verse desnuda a él pero ninguno de los dos puede decir nada ya que Vento abre la puerta. Mira con horror la escena.
--¿¿¿que es todo esto??? hija, ¿¿que haces en la cama con este hombre??
Manuela llora de vergüenza. Se levanta y se cubre con una sábana:
--no sé...
Vento la bofetea:
--¡¡eres una perdida¡¡
Mariana oye los gritos y entra en la habitación sonríe:
--vaya con la mustia de Manuela, espero que la regañen como a mi. Almenos yo no traje a mi amante a la casa.
--¡no, no... él no es mi amante¡¡ --llora Manuela.
Carlos está tan desconcertado que no se mueve. Vento lo mira con odio:
--¡¡¡y tú... vistete, como mínimo¡¡
Manuela lo mira llorando:
--¿¿que me hizo??¿que me hizo??
Carlos se viste desconcertado:
--yo no recuerdo nada.
Mariana está disfrutando de la tragedia de su hermana:
--¡¡es una perdida. Manuela es una perdida. Ella se le regaló a ese tipo¡¡ --dice Mariana.
Manuela hace que no con la cabeza llorando. Mira a Carlos esperando una explicación que él no le puede dar. Entra Leonor que hace un drama. Agarra a golpes a Manuela:
--¡¡perdida, ramera. Yo no se que he hecho para que me pagues de esa manera¡¡
--¡¡¡de verás que yo no sé qué pasó madre¡¡ --Manuela.
Mientras Leonor golpea a Manuela (Mariana, al lado de su marido, disfruta mucho esos golpes), Vento mira con odio a Carlos:
--¡¡usted ha manchado el honor de mi hija¡¡
Carlos ve a Jose se le acerca acerca esperanzado:
--¡¡tú me tienes que explicar--luego al ver al golpe le dice. ¿¿que te pasó en la cara??
--Yo estaba en la cocina, Manuela se quedó dormida ahí y tú me golpeaste. Estabas algo borracho. Yo perdí el conocimiento. Luego pasé por el cuarto de Manuela oí jadeos de los dos... no supe que hacer.
Carlos está muy desconcertado.
--¡¡me violaste¡¡ --dice Manuela llorando.
--yo... nunca haría eso..--dice Carlos.
Vento va a golpear al chico:
--¡¡maldito, te voy a matar¡
Jose se pone en medio y para el golpe poniendo los brazos delante:
--¡¡no papá. Manuela no digas eso. Yo te oí gozar¡¡¡no fue una violación.  Yo oía como le hablabas guarrerías.  Me sorprendió, te comportabas como una cualquiera. Él tomaba lo que tú le ofrecía. Por eso no intervine. Eras tú la que querías.  él estaba borracho... a lo mejor fuiste tú que lo provocaste. Yo lo conozco y sé que él nunca haría nada que tú nunca quisieras. Además  como digo soy testigo que disfrutabas más que él. Ahora no finjas. Él a lo mejor  no sabía lo que hacía pero tú sí ¡¡
--¡¡no, no¡¡ --llora Manuela mientras su madre la golpea.
Carlos agradece el apoyo de su amigo pero no dura mucho su tranquilidad. Como loco Vento le dice:
--¡¡sea como sea has deshonrado a mi hija¡¡
--¡¡eso sí que no. Manuela no me conoce,vnunca se me regalaría de yo ser el primero¡¡ --dice Carlos.
--¡¡Y eso que és?¡ --dice Manuela llorando y señalando la sábana con su pureza.
--¡¡no puede ser¡¡ --dice Carlos desconcertado al ver la sábana manchada.
Jose le pone la mano en el hombro a Carlos y con una amistad fingida le dice:
--sí, amigo. Has desvirgado a mi hermana. Me has decepcionado, no esperaba eso de ti.
Jose mira a su madre y Leonor dice:
--¡¡esto solo se arregla con una boda¡¡
Mariana disfruta al ver a su hermana tan desesperada.
--¡¡te casas con mi hija o te mato¡¡ --Vento.
Carlos no dice nada, mira al hombre con cierto miedo. Manuela es la que dice:
--¡¡yo no me puedo casar¡¡¡Madre, usted siempre me dijo que...¡¡
--¡¡esto era antes de que te conviertieras en una perdida¡¡ --la interrumpe Leonor.
Manuela mira a su padre con  suplica:
--¡yo no me puedo casar con un hombre al que no conozco¡¡
Vento golpea a su hija:
--¡¡eso habértelo pensando antes de bajarte las bragas¡¡
--me violó.--llora Manuela.
--¡¡eso es mentira¡¡ --dicen Mariana y Jose.
--yo nunca haría eso --dice Carlos.
--da igual, se tienen que casar. --sentencia Leonor.
Manuela está desesperada, Carlos está desconcertado. Jose trata de disimular su alegria

Semanas después... Carlos y Sergio están juntos. Se visten en el apartamento del primero. Sergio le ayuda a hacerle el nudo de la corbata.
--estás, muy guapo. Lástima tu cara triste.
--esta no es la boda con la que yo soñé..
--¿porque te vas a casar con esa chica si no recuerdas que te la tiraste?
-- porque es asi... si no lo hubiera visto esa sábana...
--tal vez fue un truco de ella para buscar marido.
--puede ser pero ya es tarde. Fui el primero... no la puedo dejar.
--eso de la virginidad está pasado de moda, ella se te regaló seguro pues que ahora no llore.
--es increible como engaña la gente. Esa niña parece medio monja...
--pero no lo es, a no ser que tú...
--¡¡ella se tuvo que aprovechar de mi¡¡
--¡¡pues no dejes que se salga con la suya. Su familia tiene mucho dinero pues que le compren un marido a la guarra de su hija pero no cargues tu con ella.
 --ya es tarde y además. Así le demuestro a esa prostituta  sea quien sea y esté donde esté que no me importó su engaño --dice dolido y pensando en Hilda.
--si estás seguro...
--lo estoy..
--pues te acompaño en el sentimiento. Vas a ser familia del rarito eso y de tu examante.
--la madre respetará que soy el marido de su hija y él tampoco es peligroso.
--ni tanto así, que bien que miraba.
--pero ya no. Yo creo que ya que sabe que sé... es buena onda y espero que seamos como hermanos.
--almenos vive en el seminario ¿no?
--eso se supone ¿vamos ya?
--¿y tu familia?
--va directamente a la iglesia.
Los dos amigos se van juntos.

Los invitados van llegando a la iglesia, el novio y su amigo se quedan en el altar. Jose está de los nervios. Corre a felicitar al novio.
--¿te puedo abrazar?
Sergio lo mira con rechazo. Con cariño Carlos le dice:
--ahora seremos hermanos, espero que me veas como tal.
Jose está feliz porque lo siente más suyo que nunca. Y llega la novia del brazo de su padre. La novia de blanco aunque muy triste. Los novios se miran con indiferencia.  Jose está muy nervioso espera que nada salga mal.

lejos de ahí, Alberto el profesor de Mariana, está en el hospital preocupado por una paciente a la que él encontró tirada después de ser violada y desfigurada. Habla con el médico:
--no recobra el conocimiento y su estado es muy grave... además su embarazo.
--¿y debe ser de?
--puede ser. Y es que como tardaron tanto en encontrarla pues ya no se pudo evitar.
--la tiraron como si fuera basura.
--supongo que la creían muerta. Es un milagro que usted la encontrara y que siga con vida
--¿la puedo ver?
--claro... le debe a usted la vida... a ver si usted la hace volver.
Alberto entra, esa joven tiene la cara llena de vendas. Alberto le toma la mano:
--¿¿quien te hizo esto?¿quien? estoy seguro que eras una mujer muy hermosa...
De repente Hilda abre los ojos:
--Carlos, Carlos... --menciona...
--¿¿Carlos??¿Se llama Carlos el que te hizo esto?? --pregunta Alberto a la desconcertada mujer.